Más de 3,4 mil millones de personas permanecen conectadas a internet durante seis horas y media cada día (Nielsen). En este contexto, un plan de marketing digital es la herramienta perfecta para llegar a la mayor cantidad posible de consumidores.
Además, 9 de cada 10 clientes desean comunicarse con las empresas a través de mensajería online (Twilio). Por tanto, las organizaciones no pueden quedarse rezagadas ante los nuevos hábitos digitales de las personas
Para más del 87% de las empresas es necesario ejecutar un plan de marketing digital que les permita mantener su competitividad (Hootsuite). Sin embargo, no se trata solo de la gestión de redes sociales, sino de brindar una experiencia al consumidor online de la más alta calidad en todos los sentidos.
Hoy en día, “la amenaza más grande para tu empresa no es la competencia, sino ofrecer una experiencia deficiente al cliente” (HubSpot). Es por ello que el marketing digital debe ir de la mano con el marketing offline. Solo así se puede brindar un mensaje corporativo coherente y sincronizado a los consumidores.
En este sentido, los 6 pasos para hacer un plan de marketing online a nivel empresarial son los siguientes:
Antes de planificar el futuro de la empresa con un plan de marketing digital, es necesario conocer su situación actual para partir de allí con claridad.
Internamente, se deben evaluar sus capacidades, procesos, recursos humanos y técnicos, estado financiero y su nivel de transformación digital implementada hasta el momento. De manera externa, se debe estudiar al mercado, a los clientes y competidores, las tendencias actuales, entre otros.
Para ello se pueden aplicar distintas metodologías, tal como el análisis DAFO (debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades).
Para que un plan de marketing digital sea 100% efectivo debe estar dirigido hacia un público perfectamente detallado. Cualquier inversión o esfuerzo que se realice en marketing y publicidad puede fracasar estrepitosamente si no se orienta hacia los consumidores indicados.
Por ello, se debe diseñar de manera cuidadosa a las buyer personas de la marca, esto mediante el uso de mapas de empatía, la escucha activa en redes sociales, el análisis de los pain points de los prospectos, entre otros.
Como en toda estrategia empresarial, un plan de marketing digital debe tener establecidos una serie de objetivos a alcanzar. Estos tienen que estar alineados precisamente con los objetivos generales de la empresa y contar con las características SMART:
Por otro lado, no basta con solo establecer los objetivos, sino también hay que diseñar las maneras en cómo se va a medir el alcance de ellos. Aquí es donde toman protagonismo los KPI digitales (Key Performance Indicators). Una serie de métricas que indican el progreso de todas las acciones de marketing online.
Se estima que para el año 2023 el 95% de las empresas hayan incorporado nuevos KPI digitales a su gestión empresarial (IDC España).
El diseño de la estrategia implica establecer cómo será el plan comunicacional de la empresa en los medios digitales. Es decir, aquí se definen los canales de comunicación, los mensajes a emitir, su frecuencia de distribución, los formatos a utilizar, los puntos de contacto con los clientes y todos los métodos de interacción entre la marca y sus prospectos.
La estrategia es el corazón del plan de marketing digital. Pues en ella es donde se contemplan las técnicas de marketing sensorial, email marketing, social media marketing, mobile marketing, SEO, SEM, entre otras.
Una de las principales tendencias en estrategias a nivel mundial es el inbound marketing. Esta permite multiplicar por 20 la captación de visitas dentro de 2 años desde su implementación en negocios B2B.
Una estrategia efectiva debe conjugar los esfuerzos del departamento de marketing con los de ventas, alineándolos hacia los objetivos generales de la empresa. Si esto no ocurre, el fracaso para ambos departamentos es inminente.
El plan de marketing digital debe ser diseñado dentro de los límites de un presupuesto real y factible para la empresa.
En dicho presupuesto se deben establecer todos los costos que conllevarían ejecutar el plan comunicacional propuesto. Esto incluye desde la contratación de personal, servicios tercerizados, licencias de software, canales de comunicación, entre otros, hasta el despliegue de planes de contingencia de marketing.
Por tanto, la asignación del presupuesto debe estar basada en cómo se espera que sea el retorno de la inversión (ROI).
El plan de marketing digital tiene que ser versátil, flexible y cambiante. Es decir, debe ir modificándose a medida que se vayan teniendo resultados sobre las distintas mediciones. Esto con el fin de optimizar las técnicas con mejores resultados y de modificar aquellas con resultados ineficaces.
En este sentido, la estrategia comunicacional debe visualizarse y gestionarse como un ciclo interminable. Siempre girando hacia la mejora continua según los resultados que se vayan obteniendo.
En Enzyme Advising Group somos especialistas en el diseño de planes de marketing empresarial de alto impacto. Nos basamos en las tendencias más novedosas que dominan el mercado. Además, utilizamos tecnologías de última generación como la inteligencia artificial y el big data para potenciar al máximo la estrategia comunicacional de las organizaciones.
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